Château d'Aussières

“Un lugar silvestre y natural desde donde emana una enorme fuerza, una gran belleza y una tierra de un potencial excepcional”.
Cuando Eric de Rothschild visitó Aussières en 1999, de inmediato sucumbió al encanto de la propiedad, a su belleza natural y su notable carácter e historia. Las 170 hectáreas ubicadas al centro de la propiedad han sido utilizadas para el cultivo de la vid por casi 20 siglos. El arduo trabajo y las importantes inversiones realizadas en los últimos 20 años a nivel de viñedo y de bodega le ha valido a Aussières la reputación de precursor del renacimiento del Languedoc.

Vendimia
Al igual que en los años anteriores, el clima registró drásticas variaciones en la región de Languedoc. La cercana costa mediterránea fue escenario de escasas precipitaciones no solo durante el invierno, sino que también en plena época de crecimiento. No obstante, a pesar de tales condiciones puntuales, la cosecha tuvo un buen ciclo vegetativo desde la brotación y floración hasta la maduración. Este resultado deja en evidencia que la combinación de terroir frío y de la madurez que hoy están alcanzado los viñedos permite hacer frente a condiciones climáticas atípicas.
Los desafíos planteados por el clima hicieron que las uvas de nuestros varietales alcanzaran la madurez óptima, una fantástica expresión aromática y buen equilibrio en todos los cuarteles.
Uvas
Syrah : 48%
Mourvèdre : 37%
Grenache : 8%
Carignan : 7%

Degustación
La nariz se abre con notas a madera y tostado provenientes del paso por barrica. Los aromas luego se hacen más complejos y dan paso a notas a clavo de olor y regaliz.
En boca, el ataque es modesto pero refinado, característica que confirma la juventud del vino. Con un poco de aireación, el vino no demora en ganar volumen y ofrece notas de frutos negros y especias. El sustancial aporte de Mourvèdre en la mezcla de este año, además del equilibrio del Syrah y la personalidad mediterránea de la Garnacha y del Carignan confieren al vino una estructura tánica de sobresaliente elegancia. Su largo y persistente final está marcado por notas bien integradas y harmoniosamente equilibradas de su crianza en barrica.